No es país para viejos

He seguido con bastante fidelidad la carrera de los hermanos Coen (con alguna notable laguna en los últimos años, ciertamente) pero la verdad es que estos tipos siempre me han divertido. Tienen peliculas fantasticas (como El Gran Salto) junto con peliculas que no lo son tanto. En general, es muy interesante ver como son capaces de enlazar situaciones sacadas casi del absurdo en tramas bien urdidas. Es cierto que sus peliculas pierden en calidad e interes cuando se miran demasiado al ombligo, pensando más en el chascarrillo y la gracieta y se olvidan de contarnos algo.
Precisamente, las cotas máximas de su carrera las han conseguido en sus ejercicios de máxima austeridad. Y precisamente No Es Pais Para Viejos es de este último típo de peliculas de los Coen. Claramente entroncando con Fargo.
¿Por que No Es Pais Para Viejos es una buena pelicula? Porque la sequedad con la que esta contada la historia le da un poder de atracción y de removimiento tremendo. Además de que es exactamente el modo de narración que pide la historia. Es casí como si la película hubiera sido dirigida por el asesino que encarna Javier Bardem en la pelicula.


Esa frialdad narrativa, casi de cirujano creo que le da un empaque y un poder de impacto mucho mayor a la pelicula. Es brutal, pero no se regodea, si no que lo es de la manera en que lo podría ser una autopsia.

Además, también en esta pelicula nos volvemos a encontrar a los Coen más provocadores y experimentales que se habían perdido en los últimos tal vez 5-10 años. Porque de experimental se puede catalogar esa alabanza a la deconstrucción que es la destrucción absoluta de la trama que se produce después de más de una hora de elaborado guión.
Y es que el relato es el McGuffin de esta pelicula en la que tiene mucho más peso el experimento formal y la reflexión pseudo naturista a la que hace referencia al titulo y que justifica la presencia del personaje de Tommy Lee Jones.
En definitiva, pelicula altamente recomendable que nos reencuentra con los mejores Coen. Una pena que en ella hayan renunciado al surrealismo marca de la casa y que con las pinceladas adecuadas hubiera elevado a ésta a la altura de la aún, hoy por hoy, mejor película de estos chicos. Fargo.

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No country for old men (2.007)
Guión y Dirección: Joel Coen y Ethan Coen
Musica Original: Carter Burwell
Interpretes:Josh Brolin, Javier Bardem, Tommy Lee Jones, Kelly MacDonald

The Killers - Day and Age

The Killers se estrenarón alla por el 2004 con uno de los mejores discos de la decada (en mi opinión, claro) que es Hot Fuss. A pesar de que la banda procede de Las Vegas, por su estilo e influencias rapidamente se le encuadró en una nueva ola de bandas británicas junto con otras como Franz Ferdindand. Su éxito fulgurante con temazos como "Take me Out", "Mr. Brightside" o "Smile like you mean it" fue en parte una trampa para ellos.
Catalogados por la prensa como "El mejor grupo inglés de los EE.UU.", la reacción del grupo fue intentar volver a sus raices para intentar sonar más "genuinamente americanos". El resultado de esto fue su segundo albúm, Sam's Town. Este segundo disco, si bien tiene algunas canciones estimables ("When we were young" o "For Reasons Unknown") es sin duda un disco fallido. The Killers son brillantes cuando suenan a The Killers y desgraciadamente para ellos, eso en nada se parece a Bob Dylan.
Afortunadamente, parece que su nuevo y tercer disco, "Day and Age" pretende volver a su sonido original. Eso si, probablemente se les haya ido la mano. Si en el disco anterior, pretendieron ir de tipos duros y no les salió la jugada, "Day and Age" es el reverso "blandito" de Hot Fuss. The Killers nunca han sido la banda más dura del mundo, pero en Hot Fuss si que había un par de canciones un poco más gamberras y rockeras.

Lo bueno es que, salvo eso, "Day and Age" suena a puro Killers. Y eso significa emotividad a tope (que otros llamarían pastel ;) ) y unas canciones grandiosas. Para muestra, un ejemplo:



En definitiva, el album reune lo mejor de estos chicos: teclados ochenteros, guitarras, el toque justo de megalomanía y unos estribillos infecciosos que a mi se me meten en la cabeza con una facilidad pasmosa. En definitiva, un grupo 100% recomendable y un album ideal para mejorar el estado de ánimo.
Eso si, para mi desgracia, su concierto en Madrid el próximo Marzo agotó las entradas en menos de una hora, así que seguiré teniendo el verles en directo como asignatura pendiente.

Funny Games

El hecho de que la versión americana haya estado en boca de todos en los últimos meses creo que era una excusa perfecta para adentrarme en el mundo de Michael Haneke, director austriaco que lleva veinte años siendo el francotirador de la vieja Europa. Y que mejor para comenzar ese viaje que precisamente la versión original austriaca de este título.
Haneke es un director completamente inclasificable y que, hasta su salto al otro lado del charco este año (aunque, eso si, con, probablemente, su gesto más provocador hasta la fecha y que merece un post a parte) ha navegado libremente realizando peliculas pequeñas, baratas pero que habitualmente son disparos secos y certeros en la sien de las conciencias.
La violencia es el tema central de su filmografía en la que abundan titulos en los que reflexiona sobre las distintas dimensiones que tiene este fenomeno. Funny Games es un heredero directo de su anterior película "El video de Benny" (1992) que desde aquí también recomiendo.
En el título que nos ocupa, su reflexión gira en torno a la banalización de la violencia existente en una sociedad en la que estamos acostumbrados a ver muertos en las noticias o matar a gente en los videojuegos. Realmente es un tema que se puede rastrear en varias peliculas de los últimos años, pero la reflexión de Haneke es un poco especial comparada con otras.
En Fanny Games no se pretenden enunciar causas o analisis psicológicos, no se pretenden dar soluciones y mucho menos, se pretende enjuiciar. Haneke no es amigo de peliculas enunciativas qeu te digan lo que debes pensar. Él es especialista en, como decía, dar bofetadas en la cara. Lo que pretende es alterar al espectador, indignarle, enfadarle, hacerse removerse en su asiento para que de esta manera, del propio espectador surja la reflexión.
Funny Games es brutal, cruda y descarnada. No os espereis violencia gratuita (aunque si explicita) ni melodrama barato (aunque si situaciones al limite). La narración es seca y concisa, sin florituras (aunque posee un plano-secuencia de varios minutos memorable en el salón con un simple plano fijo).
La pelicula es cruda y violenta, pero el director no pretende utilizarla. Provocar con violencia explicita sería lo facil. Haneke provoca retando al espectador, poniendole delante de sus ojos el juego, enseñandole las cuerdas de las marionetas pero sin ello restarle un ápice de crudeza a las situaciones. Incluso, en varios momentos, los protagonistas interactúan con el espectador... como el mítico momento del guiño de Paul a cámara que sin duda debió escandalizar a más de un académico.


El asunto es que Haneke dice, esto es un juego, tu y yo lo sabemos, pero... ¿Eso hace la violencia menos terrible?
Pelicula sin duda alguna imprescindible. Sin moralinas ni discursos, pero con un mensaje increiblemente poderoso, con una narrativa muy depurada y con unas interpretaciones perfectamente medidas. Eso si, como ocurre con la mayoría de peliculas europeas minoritarias que llegan a España, el doblaje es lamentable así que por favor... versión original

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Funny Games (1.997)
Guión y Dirección: Michael Haneke
Fotografía: Jürges Jürges
Interpretes:Susanne Lothar, Ulrich Mühe, Arno Frisch, Frank Giering

Brick

Esta es sin duda una pequeña sorpresa. Se trata de la opera prima de su director, Rian Johnson y es un intento de adaptar una trama del más puro cine negro americano (con sus gansters, asesinatos y heroes oscuros) al mundo de los institutos americanos.
A pesar de tratarse de una pelicula que ganó el premio especial del jurado en Sundance 2005, en España se estrenó de tapadillo en un par de cines en el año 2007 y no fue hasta hace unas semanas cuando cayó en mis manos.
Antes de nada, hay que advertir que Brick no se trata de una película perfecta. Tiene algunos defectos típicos del cine primerizo, entre los que destaca un cierto ritmo irregular que no le hace ningún favor a una pelicula gelida y concisa cual corte de un cirujano. En estas circunstancias, un muy medido control del ritmo se hace esencial y es cierto que la pelicula decae en algunos momentos.
Sin embargo, la razón que ha hecho que aparezca aquí (donde solo aparecerán cosas dignas de ser destacadas) es que a pesar de sus defectos me ha parecido una pelicula increiblemente sugerente e inquietante. Y para que quede un poco más claro porque me atrajo esta película al verla solo tendré que deciros cual es el referente e influencia principal de este chico, David Lynch.
Efectivamente, cuando uno esta observando Brick, no puede evitar pensar que esta viendo lo que sería la versión Lynchiana de una pelicula de adolescentes. Eso si, hay que aclarar que me refiero al Lynch de hace unos años, el de Corazón Salvaje o Terciopelo Azul.
Y es que uno puede observar como desfilan por la pantalla ese tipo de personajes lynchianos, oscuros, misteriosos, esos toques de humor surrealista (la madre de The Pin es impagable) y esa dirección artistica que vacía los espacios junto con la utilización de angulares que aumentan la sensación de opresión.
En fin, en todo caso, una pelicula original, entretenida e interesante. Muy recomendable para quien quiera ver una pelicula americana diferente.
Definitivamente, habrá que seguir la pista a este chico.

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Brick (2.005)
Guión y Dirección: Rian Johnson
Fotografía: Steve Yedlin
Interpretes:Joseph Gordon-Levitt, Nora Zehetner, Lukas Haas, Noah Fleiss